Foto: @ufc

Por: Jesús May 

Amanda Nunes sin despeinarse y sin ningún problema terminó con la retadora a su cinturón de peso ligero, Megan Anderson, en solo minutos del primer round, en la segunda pelea por un campeonato en el evento del UFC 259.

La brasileña llegó a esta pelea con una racha de seis años sin derrota y como campeona de dos divisiones distintas simultáneamente, mientras que Anderson se había ganado la oportunidad por esta pelea después de dos victorias seguidas.

Aunque la altura y alcance de la retadora complicaron a la brasileña, desde el inicio, el boxeo de la monarca de la división se hizo presente, inmediatamente fue hacia adelante para golpear a Anderson y una combinación de tres golpes bastaron para poner en malas condiciones a la australiana, quien al verse en problemas después de los impactos buscó un derribo.

Ya a ras de lona, la campeona dominó en las transiciones, con lo que rápidamente logró poner y cruzar sus pies alrededor de la cabeza de Anderson y logró sujetar el brazo derecho de su rival para hacer una letal llave que instantáneamente hizo rendirse a Megan Anderson, quien al terminar la pelea agradeció y reconoció la victoria de Nunes, la cual ya celebraba con su pequeña hija en brazos.

Con esta victoria Amanda “La Leona” Nunes logró su segunda defensa de su campeonato de peso pluma, sumó un récord de 21 victorias y 4 derrotas, obtuvo su finalización 14 en el primer round, lleva seis años invicta como profesional y sigue siendo aún doble campeona de la UFC, en este combate solo recibió dos golpes y no parece que alguien vuelva a derrotar a la brasileña antes de que se retire.